TIEMPOS DE CAMBIOS: ECONOMÍA DE BAJO CONTACTO

El gran confinamiento (The great lockdown), como ha llamado el FMI a la crisis mundial causada por el COVID 19, se caracteriza por una gran incertidumbre, y la respuesta de los gobiernos es realizar restricciones muy severas para disminuir el riesgo de avance de contagio, por ende, pérdidas humanas. Estas respuestas de cada país han obligado ha cambiar los hábitos de la sociedad en todos sus aspectos, por ejemplo, la forma como socializamos, trabajamos, compramos, etc. Es allí donde nacen alternativas o nuevas formas de realizar nuestras actividades económicas basadas en el poco contacto con los demás, lo que llamamos economías de bajo contacto.

Según board of innovation, una economía de bajo contacto (Low – Touch economy, por sus siglas en inglés), es una economía conformada por nuevos hábitos de consumo, menor contacto y restricciones en la higiene, post - pandemia. Si bien la pandemia ha cambiado la manera de gestionar nuestras actividades, también podría ser oportunidades para las empresas.

Después de la pandemia, se espera que existan nuevas oportunidades de negocio, que requerirán de una agudeza para poder generar estrategias según el negocio lo requiera, además de otras variables propias de las empresas. Estos son algunos de los negocios que se espera puedan ser más cercanos a la realidad.

Necesidad de terapias o coaching remoto debido a problemas de estrés, depresión, pérdida de trabajo, etc. Las empresas y consumidores tomarán muchas precauciones para interactuar. Allí los registros de salud serán necesarios, por parte del consumidor y, la manera de brindar el servicio o bien, por parte de la empresa. Trabajos que van más allá de las oficinas, donde se verá una gran demanda por equipos especiales de audio y video, para poder realizar el trabajo. Debido a las nuevas formas legales por el trabajo en línea, los abogados cambiarán a una forma digital de trabajo. Entrega de productos más especializadas, como llevar a cada casa o lugar. Eventos sociales repensados, como ceremonias ajustadas, por ejemplo: micro weddings.

Para concluir, las economías de bajo contacto son alternativas para poder generar producción ante un periodo de recesión como el presente. Es necesario, tomar en cuenta, que un factor fundamental para las empresas es la capacidad de adaptarse y de pensar en términos de i+d.